Finanzas corporativas, el camino al éxito empresario.
Con la realidad como lección más clara de todo concepto, comienza
en esta edición una saga de casos exitosos de decisiones financieras,
en el siempre complejo contexto argentino.
El secreto del éxito de la administración financiera reside en cómo lograr maximizar el valor de las empresas para sus accionistas. Esta simple pero profunda aseveración desvela tanto a autores y profesores, como a los Gerentes y Directores Financieros, que, en definitiva, son los actores del tema. Mucho se ha escrito al respecto y la teorÃa ha desarrollado cada concepto en forma detallada y consistente. Sin embargo, es la realidad, la existencia y supervivencia de las empresas las que han convalidado, a lo largo del tiempo, la tangibilidad de los conceptos.La interacción entre quien o quienes tienen a su cargo el desarrollo de la visión de la empresa y quienes son responsables de la asignación y el uso de los recursos financieros, es de extrema importancia para la materialización de dicha visión y en definitiva, para el crecimiento de la empresa. Los objetivos de largo plazo, que son delineados generalmente por el directorio, chocan a la hora de su implementación con distinto tipo de restricciones que impone la realidad. EspecÃficamente, las que atañen al responsable del área financiera tienen que ver con dos cuestiones claras: cómo obtener el dinero para financiar ese crecimiento y de qué modo gastar el dinero obtenido en forma eficiente. ¿Cómo es la estructura del balance actual? ¿Cual es el perfil actual del pasivo de la empresa? ¿Cuánto se podrÃa aumentar la deuda? ¿Conviene que sea de largo plazo únicamente? ¿Cuáles son las fuentes de financiamiento posibles? ¿Es conveniente recurrir al mercado de capitales y emitir deuda con oferta pública o es mejor ampliar el capital? Estas son algunas de las preguntas clásicas que enfrenta el director financiero. Estas decisiones deben estar enmarcadas en la convicción de que los activos que serán financiados, generarán suficiente cash como para saldar las deudas contraÃdas y un excedente que incrementará y creará valor.
Existen además otros objetivos que el directorio puede plantear, como:
Maximizar las ventas y el market share de la empresa
Minimizar la estructura de costos
Mantener un ritmo de crecimiento estable
Pero no todas son flores. En ciertos casos el objetivo del equipo de finanzas puede traducirse en:
Sobrevivir, ante el advenimiento de una crisis o un entorno hostil
Evitar el distress financiero y la bancarrota
Corregir una estructura de capital desbalanceada
La Argentina es un paÃs, que por su historia reciente de naturaleza económico-polÃtica severamente cambiante, permite encontrar ejemplos muy enriquecedores sobre cómo han hecho los mencionados protagonistas para lograr, a pesar del contexto, el éxito. Y son esos ejemplos los que buscaremos acercarles a nuestros lectores en esta nueva columna que abordamos desde el presente número de Alzas y Bajas. Tenemos la convicción de que repasando distintos casos de empresas de la actualidad, reproduciendo los conceptos, las ideas y los principios que guiaron en la toma de decisiones a quienes tenÃan a su cargo el timón de cada uno de esos barcos, podremos tangibilizar y acercarles las estrategias que mejor conducen al éxito. La práctica y la realidad son apasionantes y aleccionadoras.
Año 2001: el default de Acindar. Durante la década del ‘90, el grupo de control accionario a cargo de Arturo Acevedo, decide acompañar el cambio y el crecimiento del paÃs, para lo cual realizan una serie de inversiones estratégicas que los llevarÃan a incrementar la producción, mediante la puesta en funcionamiento de plantas más eficientes en cuanto a su estructura de costos con el resultado de productos de mejor calidad. Cuando las mejoras introducidas debÃan comenzar a dar sus frutos, se conjugan una serie de eventos que llevan a la empresa a una situación extremadamente difÃcil. Ventas locales e internacionales insuficientes, llevan a la empresa a no poder cumplir sus compromisos y, por ende, al default propio, paradójicamente dÃas antes del default de Argentina.Este hecho cambió la historia de la compañÃa, que para poder subsistir, decidió la incorporación de un socio estratégico que terminó convirtiéndose en el accionista mayoritario y llevarÃa finalmente a Acindar a insertarse en uno de los grupos lÃderes en la producción mundial de acero, alejándola del peligro de desaparecer. Un entorno absolutamente adverso, vencido por la implementación de una estrategia inteligente. Año 2009. Aluar. ¿Cómo y dónde conseguir recursos para seguir creciendo y desarrollando un plan estratégico de expansión de planta cuando se está inmerso en medio de la crisis financiera más grande de la historia actual, después de la del año ‘30?
Con la desconfianza a flor de piel, los bancos no ofrecÃan alternativas. Sin embargo, Aluar SA encontró una respuesta práctica a esta pregunta. Y apoyándose en su excelente trayectoria y en la relación que habÃa desarrollado a largo de su historia con los accionistas minoritarios y el mercado de capitales, la empresa emitió y colocó 382 millones de nuevas acciones, haciéndose de gran parte de los recursos para finalizar las obras. En definitiva, Aluar pudo continuar creando valor, a partir del propio crédito que supo cultivar. Dos ejemplos abreviados que nos permiten introducir los casos que abordaremos en profundidad en los próximos números.